El teléfono 016, que recoge confidencialmente consultas sobre violencia contra las mujeres, ha duplicado su servicio ante el colapso que sufrió pocas horas después de que se presentara, el pasado sábado, una campaña para dar a conocerlo.
Según ha anunciado la secretaria de Políticas de Igualdad, Soledad Murillo, el servicio se ha reforzado ante la avalancha de llamadas que ha recibido este fin de semana y "se hará de nuevo siempre que sea preciso" para atender las llamadas de víctimas, familiares o personas que requieran asesoramiento sobre el maltrato doméstico.
"Era un servicio absolutamente necesario, tanto que se han desbordado las expectativas, como demuestra que se colapsara el teléfono el domingo", ha asegurado Murillo, quien explicó que ante esta situación se habló con la empresa ese día y "ya está arreglado".
Para la responsable de Igualdad, "colapsar el teléfono significa evidentemente que había un demanda muchísimo mayor de la que habíamos calculado por el número de denuncias", entre otros criterios, como el hecho de que desde el 3 de septiembre que entró en funcionamiento se habían recibido 445 llamadas.
El Gobierno ha puesto en marcha hoy la nueva campaña que se difundirá en los medios de comunicación sobre este servicio telefónico que funciona las 24 horas del día y los 365 días del año, que no deja huella ni en la marcación ni en la factura, para ayudar a las maltratadas a salir de la violencia.
En el anuncio para difundir el servicio se ve una pantalla negra de un cardiograma que registra en una línea verde la intensidad del latido del corazón y que de repente anuncia la muerte clínica.
A continuación se escucha el sonido del tono telefónico del 016 mientras una "voz en off" dice: 'Para que la Violencia de Género nunca más deje esta señal, la sociedad tiene esta otra. 016 dígame, tranquila te vamos a ayudar. A la primera señal de maltrato llama. El teléfono 016 puede significar otra vida'.
La campaña se difundirá por los canales tradicionales de la prensa escrita, televisión, radio, vallas, tarjetas postales, folletos, etcétera-, pero también se ha incluido a las publicaciones dirigidas a los inmigrantes -uno de los colectivos más castigados por este tipo de violencia- y la distribución de cartelería se extenderá además a locutorios y farmacias.
"Nos felicitamos porque se confía en el servicio y nos felicitamos porque colapsar significa que era absolutamente necesario un teléfono de estas características", concluye Murillo.
Fuente El Mundo
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