lunes, agosto 07, 2006


Un hombre de 28 años se ha entregado a la Guardia Civil después de matar a su novia de varias puñaladas que le asestó en el domicilio que compartían en la localidad ciudadrealeña de Daimiel.

Según informó la Subdelegación del Gobierno, el detenido, cuya identidad se corresponde con las iniciales V.M.F-B.F-C., se entregó anoche, a las 23.35 horas en el cuartel de la Guardia Civil de Daimiel, donde confesó que había matado a su novia, A.B.B.G., también de 28 años, en la casa donde vivían.

Los agentes se desplazaron al lugar y comprobaron la veracidad de lo relatado, ya que el cadáver de la mujer se encontraba en el salón-comedor de la vivienda y presentaba varias puñaladas efectuadas con un cuchillo de cocina.

Tanto el presunto homicida como su víctima habían nacido en Ciudad Real, pero eran vecinos de Daimiel.

El detenido carece de antecedentes por violencia doméstica y no tenía orden de alejamiento de su víctima.

Muere en el hospital la joven quemada por su marido hace un año en Puertollano


Una joven de 25 años, a la que su marido quemó tras rociarla con líquido inflamable el 30 de julio de 2005 en Puertollano (Ciudad Real), ha muerto en el Hospital Universitario de Getafe (Madrid), en el que permaneció ingresada desde el día de la agresión.

Fuentes del Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha informaron del fallecimiento de Vanessa R. G., que ingresó en la Unidad de Grandes Quemados del hospital con quemaduras en el 61% de su cuerpo y ha permanecido en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del centro "muy grave, entubada y casi sin poder hablar", según declaró su madre, Josefa García, el pasado 11 de julio.

El presunto asesino, Horacio Barco, detenido tras cometer el crimen, permanece interno en la cárcel de Herrera de La Mancha después de que la juez de Puertollano decretara su ingreso en prisión incondicional, acusado de intento de homicidio.

Los testigos del suceso relataron en su momento que el agresor abordó a la víctima en la calle Velázquez de Puertollano cuando esta iba a trabajar, la besó y después vertió sobre ella una botella con líquido inflamable, que posteriormente prendió con un mechero.

Dos meses antes del suceso, la víctima ya había presentado una denuncia contra su marido por malos tratos en la comisaría local de Policía Nacional, por la que el presunto agresor fue detenido y pasó a disposición judicial, aunque la mujer no solicitó la orden de protección.

Fuente El Mundo